14 octubre 2016

Mermelada de cereza

La mermelada de cereza es deliciosa, existen variantes para su elaboración que incluyen conservadores y distintos productos para espesarla, en lo particular no los uso ya es decisión de cada persona su utilización.


Estos productos van desde grenetina, agar-agar, pectina, etc., aquí te dejo un link en caso de que desees conocerlos o utilizarlos. 

La cantidad de fruta dependerá de cuánta mermelada desees hacer, además de qué tanta intensidad desees.

Yo hice, en esta ocasión 1,800 ya que la temporada dura poco y aproveché que las cerezas estaban en su mejor punto.






Necesitarás un aparato como este, o similar, para facilitarte al sacarle el hueso, en caso de no tenerlo habrá que partir la cereza por la mitad y sacárselo, ten cuidado con la ropa ya que si salpica el jugo puede mancharla y es difícil sacar la mancha. 

Pon un recipiente debajo donde caigan los huesitos.








Ingredientes

1,800 kg. de cerezas
500 gm azúcar especial para mermelada o azúcar morena
el jugo de un limón
Opcional: piel de manzana para espesar
Mete un plato pequeño al congelador que usarás después.



Normalmente para saber cuánta azúcar utilizar es la medida 2 a 1, ejemplo, 1 kilo de fruta 500 gm. azúcar, 500 gm. de fruta, 250 gm de azúcar, así te queda dulce, a mi me gusta que sepa más a fruta que a azúcar por eso le pongo menos azúcar, sin embargo cuesta más trabajo espesarla.

Primero pones el azúcar con las cerezas ya deshuesadas y el jugo del limón, lo mezclas bien y lo dejas de 1 a 2 hrs. para que se impregnen los ingredientes. 


Una vez pasado el tiempo lo pones a fuego alto y mezclas constantemente, (aquí se agrega la piel de manzana) no lo descuides ya que se puede quemar el azúcar, mueve bien el azúcar de las paredes, cuando empiece a hervir le bajas el fuego a bajo y la dejas hacer, moviendo de vez en cuando.




Pasados unos 20 min., sacas la piel de manzana, en caso que la hayas utilizado, y con la ayuda de un  triturador, con cuidado para que no salpique, la dejas a tu gusto, mientras más la tritures menos fruta se sentirá, aquí es a tu elección.



Sacas el plato del congelador y para que sepas si está lista la mermelada pones un poco en el plato y lo pones horizontal, si la mermelada escurre un poquito y después se queda firme, está lista la mermelada, si se resbala aun le falta.

Ya por último, cuando aun está caliente, la envasas, si deseas saber cómo esterilizar los envases de cristal da click Aquí; aprietas bien las tapaderas y los dejas volteados boca abajo, esto provocará que se forme el vacío y así te durarán más tiempo.


  









Espero que tengas éxito y disfrutes de esta deliciosa mermelada!

Cómo esterilizar frascos

Esterilizar frascos es muy sencillo!

En una olla profunda pones en la parte de abajo un trapo con la finalidad de que los frascos no choquen al estar hirviendo.






Pones los frascos boca arriba y las tapaderas también.

Llenas la olla hasta que los frascos estén cubiertos de agua, los dejas hirviendo por 30 minutos.





Una vez pasado el tiempo, sacas los frascos con la ayuda de una pinza, ya que estarán muy calientes y los pones sobre una toalla de cocina boca abajo.

Al servir la mermelada los frascos deben estar calientes.


Si deseas, después de haberlos llenado de la mermelada o otro producto, puedes repetir el proceso con los frascos ya llenos y boca arriba, con la finalidad de que se conserve por más tiempo, aunque te aseguro que no hará falta ya que la terminarás mucho antes!






06 junio 2016

¡El agua es vida!

¿Cuánta agua es recomendable beber?, en este post encontrarás una respuesta, digo una, porque hay varias, lo importante es que te mantengas hidratado para que tu cuerpo funcione lo mejor posible. La mejor agua para beber es la de manantial, ya que al ser envasada directamente contiene todos los componentes necesarios para el cuerpo, si bien no tenemos un manantial en la esquina de la casa, al comprar el agua embotellada verifica de donde proviene, así sabrás si contiene los minerales esenciales y oligoelementos (magnesio, cobre, yodo, selenio y molibdeno) para ayudar a tu organismo a satisfacer tus necesidades diarias de agua.

En condiciones normales, un ser humano cada día pierde unos dos litros de agua entre el sudor, respiración, orina y defecaciones, y lógico, estos dos litros deben ser recuperados cada día.
El cerebro humano, está compuesto de un 95 % de agua, la sangre de un 82%, y los pulmones de un 90% de agua. Es por ello, que apenas una disminución de un 2% en la composición de nuestro cuerpo puede causar ya los primeros síntomas de deshidratación, como son la perdida momentánea de la memoria, problemas con las matemáticas, dificultad en enfocar la mirada en objetos o letras pequeñas, etc…
Un déficit de agua del 4% acarrea dolores de cabeza, irritabilidad, somnolencia y graves dificultades de concentración. Si alcanzamos un 10% de pérdida de peso corporal debido a la deshidratación, podemos perder la vida.
¿Te fijas lo importante que es mantenernos hidratados? Si no te gusta el agua natural, puedes probar infinidad de aguas de frutas (con poco endulzante), tés, frutas, etc., para que te des una idea de los alimentos que más agua contienen:
1. Hortalizas: Contienen 95% aproximadamente.
2.  Frutas: Hasta 91%.
3. Yogur: Tiene 86%.
4. Pescado blanco: Éste, aunque no lo creas aporta 82%.
5. Huevo: Básico en los desayunos familiares, ofrece 75% de líquido.
6. Mariscos: Tienen 79%.
7. Pollo: Posee  67%.
Así que fortalezcamos nuestro cuerpo ¡estando bien hidratados!